La detección convencional, es la solución para pequeñas instalaciones y presenta una buena relación precio/producto. Su implementación es muy sencilla y requiere bajo mantenimiento.

Se han diseñado para garantizar la máxima seguridad y confiabilidad a las instalaciones.

Este sistema de detección se utiliza cuando la detección de humo debe realizarse en forma temprana, la sensibilidad y velocidad de detección es superior a los detectores convencionales.

Se diseñan sistemas para detectar gases especiales como ser CO (monóxido de carbono), CO2 (dióxido de carbono), NH3 (amoníaco), gas natural, ácidos, alcoholes etc.